El 6 de octubre de 1999 fallece en Lisboa Amália Rodrigues, una de las máximas figuras de la música portuguesa del siglo XX
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Información procedente del Diario El Mundo de esa fecha
La voz de la cantante portuguesa Amália Rodrigues, la mayor intérprete del tradicional fado, conocida como «la voz de Portugal», ha dejado de sonar. Rodrigues, de 79 años, ha muerto hoy en su casa de Lisboa a causa de una parada cardio-respiratoria.
La figura artística portuguesa más conocida en el extranjero nació en Lisboa en 1920, aunque la fecha concreta de su nacimiento se desconoce. Educada por su abuela, cantó por primera vez en público en 1929, en una fiesta de una escuela lisboeta.
Fue en 1939 cuando debutó, interpretando tres fados en el Retiro de Severa en Lisboa y su salto al extranjero se produjo el 7 de febrero de 1943 en Madrid, donde fue invitada por el entonces embajador portugués en España, Pedro Teotonio Pereira. A este hecho le siguió su éxito en Brasil, país donde grabó varios discos.
En una carrera llena de éxitos dentro y fuera de la frontera portuguesa, Amália Rodrigues también realizó alguna incursión en el cine, con peliculas como «Capas Negras», de Armando Miranda o «Os amantes do Tejo», de Henri Verneuil.
Tras el 25 de Abril, editó el single «Meu amor e marinheiro», con una portada alusiva a la Revolución de los Claveles y poco después se apartó de la vida pública, pues se la relacionó con el régimen de Salazar. No volvió a dejarse ver hasta meses mas tarde con la participación en una gala de UNICEF en París, en junio de 1975.
En 1980 cantó el tema «Coimbra» junto a Julio Iglesias para la televisión francesa y, durante las dos décadas siguientes, su carrera se basó principalmente en la reedición de sus éxitos y la publicación de temas inéditos. Su último gran concierto se celebró en el Coliseo de los Recreos de Lisboa el 11 de diciembre de 1994.
Muchos consideran que sus interpretaciones de fado (en portugués «destino») permitían al mundo atisbar las profundidades del alma de los portugueses.
Las letras de fado son de contenido sentimental, enfocando temas de anhelos, tristeza y fatalismo, mientras que los acompañamientos de guitarra combinan influencias de las culturas árabe, africana y portuguesa.
A lo largo de su carrera, Amália Rodrigues recibió numerosos premios y condecoraciones, como la insignia de la Gran Encomienda de las Artes y de las Letras, concedida por el Gobierno francés, el lazo de la Orden de Isabel la Católica, de España, y la Medalla de Oro de la ciudad de Lisboa.
El Gobierno portugués decretó tres días de luto en señal de duelo por la pérdida de la que se considera «la voz de Portugal», un calificativo empleado por el ex presidente de la República, Mario Soares.
